5:15 AM Edit This 2 Comments »
Que no me doy cuenta de nada. Que tengo cuerpo de tamal. Que mi boca es muy grande. Que mi ropa no combina. Que me porto mal en misa. Que no quiero comer paella. Que no quiero hacer la kirsh. Que hablo demás...de los demás. Que me quedo dormida. Que soy medio comunista. Que soy tres cuartos snob. Que mi casa es un desastre. Que mi vida es un desorden. Que no hay comida en mi refri. Que no he pagado la luz. Que soy demasiado egoísta. Que tengo el pelo maltratado. Que mi futuro es incierto. Que no soy novia de un apellido. Y que mis logros se eclipsan con herejía, con desfachatez, con locura y con poemas... y con todos los colores.

6:17 AM Edit This 1 Comment »

La mala suerte

Cuando pase la mala suerte me lavaré la cara, me recogeré el pelo, me cambiaré de limpio. Mientras dure la mala suerte luciérnagas púrpuras me marcarán las huellas y seguirán mis pasos. Para que no me sienta sola, para que no me envuelva la noche. Cuando pase la mala suerte y un rayo fugaz me cegue los ojos... para no ver más que destellos hermosos y sordos. Mientras dura la mala suerte pondré tímidas antorchas violetas en mi puerta. Para no perderla, para no olvidar que existe. Cuando pase la mala suerte y me tire a dormir en las nubes... sin sentir la emoción de la caída.

6:36 PM Edit This 2 Comments »

El Ocho y el Cuatro

El ocho y el cuatro se dan la mano.
El cuatro se siente bien, el ocho está algo enfadado.
El cuatro ya no se fija, el ocho se desespera.
El cuatro es completo, el ocho infinito.
El ocho con miedo, el cuatro confiado.
El cuatro es el ciclo, el ocho es la línea.
Mi ocho y mi cuatro no encuentran camino.
Ni seis, ni motivo...
Están frente a frente y se miran. Sin hablar. Sin tocarse.
Sin saber qué hacer conmigo.